China se convierte en el primer generador de energía solar.

China superó a Alemania como mayor generador mundial de energía solar, con 43 gigavatios instalados a finales de 2015, según los datos publicados este jueves por la Asociación de la Industria Fotovoltaica del gigante asiático. El gigante asiático añadió el año pasado 15 gigavatios de capacidad de generación de energía, un 40% más de los que tenía al empezar el ejercicio. De esta forma, adelanta a la mayor economía de la eurozona, que tiene 40 gigavatios instalados según los datos citados por la agencia oficial Xinhua.

A pesar de que el carbón se mantiene como su principal fuente de energía, la potencia asiática cuenta con ambiciosos planes para potenciar las energías renovables que contemplan que, para 2020, un 15% de la electricidad consumida proceda de fuentes alternativas a los combustibles fósiles.

La Administración Nacional de la Energía china tiene previsto triplicar la capacidad de generación de energía solar instalada en la actualidad hasta los 150 gigavatios para dentro de cinco años.

El secretario general de la Asociación de la Industria Fotovoltaica de China, Wang Bohua, pidió a Pekín medidas que promuevan el desarrollo y la financiación de las empresas del sector.

Fuente: http://economia.elpais.com/economia/2016/01/21/actualidad/1453373828_088607.html

Sismo bursátil en China

Los vaivenes de la Bolsa china durante la última semana han hecho temblar los cimientos de los parqués de todo el planeta, pero ¿cuáles son sus repercusiones económicas reales?

¿Qué ha pasado esta semana en China?

El gigante asiático ha vivido una semana muy complicada. Los débiles datos de su sector manufacturero y de servicios, la mayor devaluación sufrida por el yuan desde este verano y la entrada en vigor de una normativa que suspendía la sesión bursátil automáticamente si las pérdidas alcanzadas en una jornada superaban el 7% (medida que fue abolida a los cuatro días ante sus nefastos resultados) han provocado una gran volatilidad en los parqués de Shanghái y Shenzhen que han afectado al resto de mercados mundiales. Pese a que ayer las Bolsas chinas remontaron algo de lo perdido y cerraron con subidas moderadas, en tan solo una semana se han dejado alrededor de un 10% de su valor.

¿Cómo ha afectado al resto de parqués internacionales?

En los cuatro primeros días, se estima que de los parqués mundiales se han evaporado unos 4 billones de dólares, y pese a que el hundimiento del precio del petróleo o la crisis que atraviesan los emergentes también han contribuido a ello, los expertos apuntan a China como el principal detonante del descalabro. Si hasta hace poco el país asiático era visto como el motor que propulsaba gran parte de la economía mundial, ahora está pasando a ser considerado el freno que la ralentiza.

¿Cómo afecta esta situación al crecimiento de las economía mundial?

Europa y Estados Unidos todavía adolecen de frágiles tasas de crecimiento, y se considera que si la economía china se desacelera aún más, esto puede suponer un gran problema para la recuperación global. Como declaró hace unos días Christine Lagarde, directora del FMI, el titubeante rendimiento de la economía china es una causa fundamental de que el crecimiento mundial presente un ritmo "decepcionante". Este también ha sido uno de los motivos por los que el Banco Mundial ha rebajado sus previsiones de crecimiento del 3,3% al 2,9% para este año. Quienes más sufren esta situación son los socios comerciales de la nación asiática. Por ejemplo, en Europa, ha sido la Bolsa de Fráncfort la que más padeció la caída bursátil china, ya que Alemania es el país europeo más dependiente de sus exportaciones a este país. Sin embargo, otros como España también se han visto afectados aunque su relación con la nación asiática sea mucho más pequeña.

¿Y los países emergentes?

Son los otros grandes perjudicados. Hasta hace poco, la pujante economía china y su necesidad de materias primas había tirado de ellos, pero con su ralentización y consiguiente disminución en la demanda de estos productos ha desembocado en una caída de los precios. Países como Brasil se hallan ahora atrapados entre esta bajada de ingresos y la subida de los tipos de interés de Estados Unidos, lo que provoca una salida de capitales.

¿Se puede producir una nueva crisis mundial?

Aunque ya hay quien como George Soros alerta de que estamos ante una situación parecida a la de 2008, la gran mayoría considera que la reacción experimentada por los mercados estos días ha sido excesiva. Aunque menos, China sigue creciendo, al igual que lo hacen Europa y Estados Unidos. Lo que si parece seguro es que las próximas semanas vendrán marcadas por la fuerte volatilidad de los parqués chinos, y muchos coinciden al señalar que hay que ser pacientes y esperar a ver qué sucede más adelante. Como señaló Angus Nicholson, analista de IG Securities, en un comunicado, "los mercados esperarán primero a ver la determinación del gobierno chino en apuntalar sus Bolsas y su moneda la semana que viene antes de que se registre ninguna recuperación importante".

Fuente: http://www.elmundo.es/economia/2016/01/09/568ff89622601d24138b4583.html